Recientemente he cumplido mis
obligaciones fiscales como ciudadano y he presentado la Declaración
de la Renta del año 2012.
Como diseñador de soluciones de
administración electrónica que soy, decidí que este año la iba
presentar por Internet y usando el DNI electrónico. De este modo
participo activamente en el uso de tramitación telemática apoyando
las estadísticas de uso y veo en primera persona como de fácil e
intuitiva es su operativa.
No me refiero a la ventaja de la
comodidad que supone no tener que estar imprimiéndola para luego ir
al banco, ya que la Agencia, de modo sabio y conociendo las
dificultades y trabas que supone el uso de certificado electrónico,
también permite la presentación mediante un código de referencia.
Como sé que dicho trámite seguramente
sea de los más utilizados, no me da mucha desconfianza su uso, y mis
expectativas son de poder presentarla en un periquete ya que uso un
sistema operativo Windows y una configuración (navegador, máquina
virtual Java,…) bastante común.
Ciertamente, al final consigo
presentarla de forma digital, pero no sin antes sufrir contratiempos.
Los problemas que tuve no son diferentes a los del resto de usuarios:
- Introducción del password del DNI-electrónico. Tuve que escribir la contraseña 14 veces sin exagerar ni una sola. De hecho me propuse contarlas, empecé contándola con los dedos, pero como al final me quedé sin dedos, tuve que anotarlas en un papel. Ni que decir tiene que para no tener que teclear la contraseña todas las veces que me lo pedía, la copiaba y pegaba con lo cual no me supuso excesivo desgaste, aunque sí es cierto que irrita un poco.
- No me dejó firmar inicialmente la solicitud de entrega. Al permitirme elegir entre varios de los certificados, no vi nada intuitivo en la pantalla de selección, cual era el certificado de firma y cual el de autenticación. Esto hizo que me equivocara escogiendo el de autenticación. El error que me dio fue algo así: “ Se ha producido un error al firmar. Inténtelo dentro de una hora o si no póngase en contacto a través del siguiente enlace…”
Afortunadamente, reaccioné a tiempo y,
a pesar de que el error que me indicó por pantalla no me dio pista
alguna, mediante el botón de atrás del navegador (porque llegué a
una pantalla en la que no podía navegar o al menos no era muy
visible) conseguí volver al lugar donde efectuar la firma y
seleccionar esta vez el certificado de firma del DNI electrónico.
Si un trámite tan importante y
ofrecido por la AEAT, que desde luego es un ejemplo paradigmático
en servicios de administración electrónica y un referente a nivel
europeo, presenta este tipo de inconvenientes, quiere decir que las
Administraciones Públicas debemos poner las cosas más fáciles a
los usuarios para que estos problemas se minimicen al máximo
posible.
Últimamente proliferan discusiones por
las redes sociales sobre el adecuado uso de la firma electrónica en
los procedimientos, su complejidad inherente, las dificultades de su
uso por parte de los ciudadanos y la búsqueda de alternativas.
Entre ellas, me ha llamado la atención
especialmente por su interés, un debate en linkedin que inició
Daniel Dianes, dentro del grupo de Administración Electrónica y
Función Pública 2.0: ¿Nos hemos pasado con la implementación de
la AE?
En ella se argumenta sobre las
dificultades de mantenimiento de @firma debido a la proliferación
de sistemas operativos, navegadores, el ritmo frenético de
actualización de Java, etc, y se plantean soluciones alternativas
así como esquemas simplificadores entre ellos de políticas de
firma.
Mi opinión al respecto es similar a la
de otros compañeros, hay que estudiar cada trámite en concreto y
tratar de adoptar la mejor implementación teniendo en cuenta su
contexto. No existe la solución fetén y, dentro de ese abanico de
posibilidades caben soluciones más innovadoras, como firmas desde el
correo electrónico o comunicaciones vía WhatsAPP, y otras más
tradicionales, si realmente es necesario por temas de legalidad,
garantías u otro tipo de cuestiones,como son las basadas en firma
electrónica de formularios en el navegador.
Por lo tanto, mucho me temo que a los
desarrollos de firma electrónica con certificado electrónico
todavía les quedan un largo recorrido, al menos en algunos ámbitos,
y por tanto hay que seguir esforzándose en optimizar su diseño
tratando de afinarlo.
Casi todos somos conscientes de los
problemas intrínsecos que supone la utilización de certificados
digitales y fundamentalmente del DNI electrónico cuando se tramita
de forma telemática. Los que surgen con más frecuencia, una vez que
se consigue tenerlo instalado y se dispone de un lector, tienen que
ver con las excesivas solicitudes del PIN, lentitud de uso, caducidad
de las claves, o la confusión que genera la doble certificación que
dispone: autenticación y firma.
Las
estadísticas demuestran que los trámites que más uso
tienen actualmente por parte de los ciudadanos, son los que no
requieren de certificado.
Concluyendo, el uso del DNI electrónico
en particular, y la problemática de firma y autenticación con
certificado en general, presenta inconvenientes que dificultan su
utilización. Pero eso no debe ser óbice para que las aplicaciones o
páginas web que lo admitan procuren estar óptimamente diseñadas,
de tal modo que impida de forma preventiva utilizar un certificado de
autenticación cuando el trámite a realizar sea una firma, te
muestre mensajes de error con información detallada de sus causas, o
no te abra más ventanas de las necesarias referentes a temas de
seguridad.
Es el deber de los responsables de
diseñar estas aplicaciones el verificar el cumplimiento de esta
casuística, fijándose en los detalles, testeando el mayor número
de caminos posibles y no solo comprobando que el caso típico
funciona, así como tratar de buscar la mayor intuitividad posible en
su uso.
Hola Daniel,
ResponderEliminartremenda experiencia la del dni-e la verdad. Tenemos el dni más avanzado del mundo pero al mismo tiempo tiene sus cosillas. A mi por ejemplo se me fastidió el chip del primero simplemente de usarlo en el lector. Por otro lado, siendo difícil adaptar la firma electrónica en linux con certificados de la fnmt, aun es más difícil con el dnie.
Yo me curré una máquina virtual linux con todo preparado para firmar y hasta funcionaba el dnie. Con ella he conseguido presentar la declaración a la primera y usando el PADRE: http://www.danieldianes.nom.es/2013/04/distribucion-linux-para-administracion-electronica-en-espana/ cuando quieras te paso el enlace de descarga.
Respecto a replantearse la implementación de la administración electrónica creo que tienes toda la razón en que habría que ir caso por caso, por eso planteé el debate, por si se me escapaba algo...
¡saludos!